No estaba muy segura de querer mezclar un tema diferente al blog, que no fuera algo referente a la literatura. Pero, vi un vídeo de uno de mis booktubers favoritos, y eso, removió en mi recuerdos que estaban un "poco" ya olvidados. Y digo, poco, por que sufrir de acoso escolar, o también llamado bullying, me marco.
No soy una orientadora, pero tengo mi experiencia. Sufrí bullying, desde primaria, por que tenia los dientes torcidos( estaban tan juntos, que uno prácticamente estaba encima de otro), por lo que me gane el apodo de diente de conejo.
Si tenia amigos, siempre tuve la oportunidad de conocer buenas personas, y algunas de ellas aun las considero mis amigas y confidentes. Tuve que cambiar de colegio dos veces, por lo que, siempre tuve que pasar por la difícil etapa de "la nueva"; Así que por tanta burla anterior, era bastante tímida y me costaba hacer amigos. Yo fingía que no me importaba, pero si me afectaba, y mis amigos lo notaban ,por que me cohibía de sonreír abiertamente para que no se fijaran en mis dientes.
Durante mi culminación de primaria, había un grupo de chicas de mi escuela nueva, que me esperaban en la salida y me golpeaban, jalaban el cabello e insultaban. Tiempo después, por ellas mismas, me entere que mi nueva profesora alababa mi habito de lectura, y eso les disgusto; Aparte que mi timidez la habían tomado como símbolo de superioridad, y que era muy selectiva con mis amistades. Si, insólito y estúpido, pero eso creyeron.
Al comenzar bachillerato, mi autoestima ya estaba por el piso. Use ortodoncia para arreglar mi problema dental, y hasta de eso se burlaban. En ese entonces, me reencontré con unas amigas de mi infancia,en ese nuevo liceo, al que me cambiaron mis padres. Así que el reencontrarme con ellas fue un poco aliviante. Aun así, sentía un vació; Y las cosas empeoraron, por cierto descontrol de hormonas padecí acné, y ya saben que la gente no es muy disimulada con la mirada. Ya temía, hasta salir. Y comencé a hacerme cortes en la piel, por la depresión; Creo que no llegue a tocar fondo, gracias a mis amistades, y a mi familia, siempre fui muy unida a ellos, cosa que mis compañeros de clase, no entendían. Y me tildaron de niñita mimada, "aperreada", tonta, mosquita muerta.
Aparte, en bachillerato, ya era muy común tener novios, y como yo no estaba en esa honda, solo leía, me gustaba pasar el rato con mis amigas, comenzaron a tildarme de lesbiana, y hasta intentaban forzarme a conocer chicos. Conversando con mi mama, aunque ella no sabia todo lo que me decían, comencé a aceptarme. También muchos libros, alegraron mis días e infundaron confianza en mi, en lo que yo opinaba, en mi forma de ser.
Nunca cambiemos, nuestras opiniones y creencias por alguien mas, o para sentirnos aceptados. A veces no nos damos cuenta, pero tendemos a buscar la aceptación de los demás, para no sentirnos solos. Esas personas no valen la pena. Sino te aceptan como eres, no son personas confiables. Cuando me di cuenta de eso, comencé a sentirme mejor. Y eso me sirvió, cuando entre a la universidad, por que no cambie para encajar, simplemente encontré personas con una dirección parecida a la mía, y que me respetaban a mi y a mis opiniones.
No nos burlemos de nadie, ya que la perfección no existe. Cometeremos errores, todos. Así que por que regodearnos, de los errores de los demás?. Por que poner apodos dolorosos, a los que ya tienen nombres?, Por que presionar a los demás a hacer cosas que tu haces?
Vivir es una experiencia única, no arruinemos la felicidad de nadie. Y aunque tuve momentos difíciles, y momentos donde me sentía vacía; Ahora me acepto y me quiero. No es facil, pero me lo recuerdo todos los días: Que tengo un montón de cosas buenas, y las enumero si es necesario, para no olvidarlo.